El concejal Íñigo Aramendi prevé finalizar este trimestre la reorganización del área que dirige
De Diario del Altoaragón de 13/09/2015
Íñigo Aramendi, concejal de Cambiar Huesca por EQUO, dirige la Concejalía de Servicios Sociales. | D.A. HUESCA.- Impulsar la coordinación entre el Ayuntamiento y las entidades sociales para evitar duplicidades y prestar una mejor y más eficaz atención es la prioridad de la Concejalía de Servicios Sociales, dirigida por Íñigo Aramendi, munícipe de la plataforma Cambiar Huesca y que defiende que los Servicios Sociales son “un derecho de la ciudadanía, no es una cosa de pobres“.
Aramendi se marca el fin de año como plazo para tener terminado el análisis interno de los Servicios Sociales municipales y de los servicios que prestan entidades privadas.
El objetivo de estos análisis es doble. Por un lado, “analizar la realidad social” y las necesidades actuales “para dar una mejor respuesta” a las personas que acuden a Servicios Sociales. Por el otro, “juntos“, Ayuntamiento y entidades sociales, poner negro sobre blanco qué programas y proyectos desarrolla cada entidad y la Administración para, a partir de allí, crear “una red bien ordenada en la que no haya duplicidades y con la que podamos ser más eficaces en la intervención“.
Señala Aramendi que “tanto la Administración como las entidades llevan tiempo trabajando en estas áreas y conocen las problemáticas” que existen.
Sin embargo, el concejal indica que “hay veces” que se dan duplicidades entre la Administración y las entidades o que “la intervención se hace más compleja“.
Por tanto, con ese análisis para “un mayor conocimiento de los programas” y la imbricación de los mismos se podrán ordenar los recursos, potenciarlos y mejorar su eficacia, sostiene Aramendi.
“Si ordenamos lo que estamos haciendo, lo potenciamos y somos eficaces en la intervención, vamos a mejorar las respuestas a las necesidades“, afirma el edil, quien asegura que la situación “óptima” sería llegar a una “buena red desde la Administración y en colaboración con las entidades sociales” respecto a los programas e intervenciones que se llevan a cabo.
“Va a ser una tarea difícil -anticipa Aramendi- pero vamos a meterle mano“.
A la vez, la Concejalía de Servicios Sociales impulsará la creación de un “observatorio de la realidad social” en el que participen, además del Ayuntamiento, las entidades del tercer sector para conocer con exactitud la problemática de la pobreza energética, los recursos alimenticios y monetarios, estableciendo a partir de allí las medidas a tomar de un modo coordinado.
REORGANIZACIÓN INTERNA DE LOS SERVICIOS SOCIALES
La Concejalía ya ha iniciado las conversaciones con los profesionales de los Servicios Sociales municipales para “analizar cómo está funcionando el servicio y ver qué cambios hay que hacer para ser más eficaces“.
Respecto a la propuesta del acuerdo de gobierno de aumentar los recursos de Servicios Sociales, el concejal responsable del área afirma que los Servicios Sociales “están saturados” y que la carga de trabajo “es grande“, aunque hasta que no esté listo el análisis Dafo (debilidades-amenazas, fortalezas-oportunidades) elude aventurar cualquier ampliación del servicio.
En este sentido, también apunta a las normas estatales que restringen la contratación pública, aunque asegura que se estudiarán las posibilidades que haya.
Aramendi resalta que “una clave de Cambiar Huesca es la participación“, por lo que “no tiene sentido imponer nada“, así que se propondrá a los trabajadores de Servicios Sociales hacer conjuntamente ese trabajo de análisis.
Aramendi prevé que el estudio de los Servicios Sociales municipales termine este trimestre y así sus conclusiones se puedan poner en marcha el año que viene.
PROVISIÓN PÚBLICA CONTRA LA POBREZA
El acuerdo de gobierno incluye también una provisión pública para garantizar las necesidades básicas de toda la población (alimentación, suministros energéticos, agua, vivienda…). Aramendi explica en este sentido que este mes comienza un análisis detallado de los presupuestos municipales -aprobados antes de las elecciones- para “ver cómo se puede configurar” de cara a los próximos presupuestos, los primeros del actual equipo de gobierno.
Señala que “queramos o no, no podemos obviar al tercer sector, muy implicado en la provisión de Servicios Sociales“. Su planteamiento al respecto es que la provisión pública sea “la guía” de la actuación municipal pero “equilibrándolo con la realidad del tercer sector“.
Muy importante en esta provisión pública también será el resultado final del proyecto del Gobierno de Aragón para una renta básica, que no es “la que le gustaría” a Aramendi al no considerarse como “un derecho de la ciudadanía“, pero sí es “un buen inicio, un buen sustrato“.
Aramendi espera que con esta y otras medidas la ciudadanía empiece a tomar conciencia de que los Servicios Sociales son “un derecho” como, por ejemplo, la prestación al desempleo: “Los Servicios Sociales son un sistema que tienen que ver con el desarrollo de los derechos de la ciudadanía, no es una cuestión de pobres“, insiste.